News Press Service
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Por Elías Prieto Rojas
Hace escasos dos años, América fue campeón femenino de la liga profesional de fútbol en Colombia. Dos cotejos, donde el mejor equipo de aquel año, como el segundo, Deportivo Independiente Medellín, jugaron dos batallas. Señoras batallas. Aguerridas, espléndidas, fenomenales. Tuve la fortuna de ver por televisión el último partido de esa final, y quedé asombrado. Atónito. Perplejo. Dos elencos donde ninguna de sus jugadoras, en medio de una feroz lluvia, regalaron nada. Ni un centímetro. Algunas terminaron jugando en una sola pierna, lesionadas por el césped, demasiado jabonoso. Pero pudo más su dignidad, el amor por sus colores. Qué mujeres. Absolutamente entregadas a su causa. Ese día escribí en mi muro que ojalá los varones tuvieran esa misma pasión por el deporte más popular… (bueno debo ser honesto: el River Plate de Argentina, hace escasos días, jugando en Brasil con el Palmeiras… esa noche los gauchos con diez hombres sembraron de miedo y de terror a los once del “jogo bonito”, que terminaron colgándose de los palos; esa fue una fatídica jornada para los argentinos en cuanto al resultado -3 -2-, pero un triunfo memorable –acéptenme esas palabras, por favor- para los albicelestes, porque pusieron de rodillas por su atrevimiento, osadía, capacidad de lucha, enjundia y vergüenza deportiva, al que en la actualidad es el mejor equipo del continente); volviendo al fútbol femenino, acaban de dar la peor noticia del año en Colombia. El torneo de fútbol femenino, año 2021, será, casi que de mes y medio. ¿Y eso cómo se llama? atraco a mano armada… machismo radical y soterrado… dirigentes incapaces… pandemia… póngale el nombre que usted quiera, pero el fútbol femenino merece un trato más justo, equitativo; no escribo ni fechas, ni marcadores, ni señalo estadios vacíos; hablo sobre algo que me indigna: la mujer merece tener en Colombia, y en todas partes, un campeonato profesional de fútbol digno, no remiendos, ni pretextos, ni tontas excusas; como dice Stella: “mejor que no organicen nada, porque no es de limosna, ni por hacer un favor”… Qué pena, muchachas, los varones las creemos poco atractivas para generar imagen, patrocinadores, etcétera, para el fútbol; sólo sé que ustedes son superiores en un terreno de juego y en demasiados aspectos de la vida cotidiana: no se tiran al césped para engañar al árbitro, no simulan faltan, ni son tan agresivas en términos de querer dañar al rival; son más nobles, cuidadosas, más honestas… se los digo yo, que he dirigido equipos femeninos y siempre me asombro de sus capacidades futbolísticas. Señores dirigentes del fútbol profesional: no la sigan embarrando porque ya tenemos cantidades de políticos ineptos, pero ustedes ¿a qué están jugando?…
3 de febrero de 2021.