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Recientemente en la prensa mundial se informaba de la aprobación por parte de al EU de la ley de mercados digitales que para muchos(as) no deja de ser una noticia más que no ofrece mayor cuidado. Resulta trascendental el hecho que los gobiernos inicien el camino para regular y controlar a los buscadores o navegadores de internet toda vez que este (internet) es el eje central del desarrollo mundial en todos los aspectos.
Es cierto que internet no tiene dueño, o al menos así lo dice la teoría, lo que si tiene son administradores y estados unidos estratégicamente entregó en el 2016 su control a la ICANN un organismo de composición mixta público-privada en teoría autónomo, que vigila por la operatividad del sistema y se pudiera ver como el Todo poderoso del mismo. Y es por allí, donde otros gobiernos como el bloque Europeo han expresado su desacuerdo e iniciaron una ofensiva para “controlar a quien nos controla”.
Con la ley de mercados digitales la UE pretende dar un status de empresa regulada por el estado a google, yahoo o cualquier otro buscador así como a las redes sociales, para tenerlas cerca.
Facebook recibío billonarias sanciones el año pasado cuando se descubrío que utilizaba la información recopilada para lucrarse al venderla de manera fraccionada a cualquiera que quiera anunciar allí, ya que conoce los gustos, su entorno, su familia, sus desplazamientos y hasta la situacion emocional de todo(a) aquel(lla) que interactua allí.
El mismo creador de esta red Zuckerberg, inició un Challenge de utilizar una aplicación creada por ellos para que quien quisiera se tomase una fotografía , corriera la app y viera como sería dentro de 10,20 40 años. Zuckerberg fue el primero en correr la app sobre su imagen y semanas despúes se había vuelto viral el juego que resultó ser sólo una ingeniosa maniobra para enseñarle al programa de inteligencia artificial como se comportaban los rostros humanos para perfeccionar el sistema de reconocimiento facial y que robó miles de millones de rostros y que ahora reposan en algún lugar; pero al igual que con las vacunas, nadíe se tomó la molestia de investigar al respecto.
Sabído es que las redes sociales han subido y bajado gobiernos, y la UE es consciente, las guerras ahora se libran en muchos escenarios y el virtual es uno de ellos. China por su parte, en su plan de 100 años ha ganado por mucho la carrera espacial, hace sólo una semana acoplaba su tercer módulo de lo que occidente no ha hecho ninguna algarabía, como tampoco han informado sobre la internet que ya funciona en ese continente y que será la segunda internet -por así decirlo- para quienes no quieran utilizar la ya existente y competír con estados unidos en el manejo de información y de espionaje para cualquiera.
De hecho esta internet es la que respalda el buscador de los teléfonos Huawei, vetados por estados unidos y que se dejaron de comercializar en muchos paises del mundo pues Google no opera en ellos. La internet China ha sído la repuesta del gigante asíatico a la negatíva de estados unidos de traspasar el control por 14 años tal como lo habían acordado los países del G8.
Con la ley de mercados digitales la UE pretende dar un status de empresa regulada por el estado a google, yahoo o cualquier otro buscador así como a las redes sociales, para tenerlas cerca y de paso sea dicho a sus ciudadanos controlados en aras de una seguridad para todos
Pero y como afectaría a la industria de Juegos de suerte y azar?
Como suelo decir depende del cristal con que se mire, en mi opinión la no censura de apps sea cual fuere su sistema operatívo pudiera favorecer a las pequeñas empresas que buscan su espacio en la industría. Alentaría el ingreso de bancos digitales y pasarelas virtuales que facilitarían las transacciones lo que abre allí un interrogante ¿son legales las apuestas de los primeros y las transacciones de los segundos?, también alentará la ya floreciente industria de los juegos en línea con todas las derivadas habídas y por haber.
La lista de pros y contras pudiera extenderse, pero lo que si es cierto es que no veo esta ley del todo sancta finalmente internet se supone es grátis, pero no lo es, allí se entrega todo a cambio de ver caer al señor en una ponchera y mojar su teléfono y eso nos hace felices…pero hay alguien detrás, el gran hermano, recopilando y archivando ese momento, para vendernos más y el precio se pagará al largo plazo.
En el futuro pudiera ser un internet al servicio del mejor postor, porque ahora tiene dos señores a quien servir.
