- Por: Elías Prieto Rojas
- Bogotá. News Press Service. La vida es como un combate, tipo UFC. Pugilistas absolutamente preparados, y más. Es la exigencia. El desafío. Para bien, o para mal. Pero, sólo, uno, gana. Y será siempre, el más inteligente, el más astuto, el más experto, el más avisado; aquel que aprovecha mejor las mismas condiciones del combate. Porque, después del primero, todos pierden. Y a los derrotados, solo los quiere su mamá. Triste, pero cierto. Por eso, y he ahí el motivo de estas líneas. Cada individuo debe hacerse un exámen de conciencia y producir, de acuerdo con sus capacidades, habilidades, experiencia, salud, dinero, y el apoyo de los suyos… me explico: la pandemia debe producir en cada uno de nosotros, un alto en el camino. Habrá que comenzar de nuevo. Soñar, que lo vivido antes del COVI, alguna vez, nos sirvió. Porque nos dejó enseñanzas, alegrías, tristezas, amistades, dinero, salud… y que nadie nos quitará lo bailado y que la experiencia no se improvisa, y demás, pero -el pero filosófico- nos ladra y a dentelladas: habrá que cambiar. Y de la cabeza y de la cola. La primera, para pensar mejor, con lucidez, evitando errores como la insolidaridad, o el egoísmo, o la misma soberbia… Y la cola, porque nos tocará movernos más, en términos de asociarnos mejor, participar, ser conscientes de ir en el pelotón puntero, pero también poniéndole el pecho a la brisa y ayudando en la orientación; liderar, inmiscuirse más en los planes de su comunidad, de su familia, de su partido político -habrá que elegir ideología, porque cruzarnos de brazos…- en definitiva: cada cual haga lo suyo y con la plena conciencia de ayudarse -para bien- consigo mismo, con su familia, con la sociedad y con su especie, y para beneficio del universo entero; esa debe ser la premisa y la educación del futuro. Y no hay otro camino, porque si usted se cree «el más vivo» y/o habla demasiado, y no actúa, o lo contrario… terminará como esos pobres noqueados guerreros de la UFC: vivos y de puro milagro. Usted decide, mi querido amigo. Tiene su libertad y se le respeta, o el Estado, se la garantiza; pero (y otra vez, el pero)… Y estamos a punto de iniciar un nuevo round; vamos en el quinto asalto; faltan siete… (meses). Y afuera el cansancio; y nos toca pensar y actuar como los campeones: con ética, pero vamos es para delante; a noquear! Duro, pero cierto. Entonces, preparémonos, con todo. Y luego le gritaba el General a sus soldados: «¡A la carga!».30. VIII. 20.
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