Por Carlos Villota Santacruz
Internacionalista, experto en marketing político, marketing de ciudad, comunicador social y periodista. Escritor
Cuando un ciudadano decide pasar a precandidato presidencial se pregunta: cuál es su causa? cuál ha sido la lucha de su vida?
Bogotá, agosto de 2024. News Press Service.Tras cumplirse dos años de Gobierno del presidente Gustavo Petro, en medio de escándalo de corrupción, altos niveles de inseguridad en el país y la cercanía al régimen de Nicolás Maduro en Venezuela, en medio de las críticas de la oposición en Colombia y la comunidad internacional por ausencia de transparencia en las elecciones del pasado 28 de julio de 2024, se comienza a mover el «ajedrez político».
Entre los nombres que comienzan a sonar para suceder a Gustavo Petro -propone un día Asamblea Nacional Constituyente y otro día, advierte que no desea reelegirse- se encuentran el ex Vicepresidente Germán Vargas Lleras, la ex Alcaldesa de Bogotá Claudia López, el ex candidato a la Alcaldía Mayor de Bogotá Rafael Quintero Mora, el Canciller Luis Gilberto Murillo, el senador David Luna, el Director del Nuevo Liberalismo Juan Manuel Galan, la Directora de Revista Semana Vicky Dávila y el ex Ministro Mauricio Cárdenas.
Quienes están en el escenario político en Colombia están en una situación de privilegio. «Muchos se van a dormir cansados de una tonelada de ataques en las calles y redes sociales. Algunos disgustos. Por los errores cometidos».
Lo que se observa en el horizonte es un país dividido entre quienes se aferran a un modelo de izquierda o quienes abrazan la libertad, la democracia y la creación de empresa.
Desde el análisis de la comunicación politica la polarización llegará en los próximos meses en Colombia a niveles nunca antes vistos. Incluso con acciones de violencia de compatriotas con una alta dosis de fanatismos.
Lo que los jóvenes, las mujeres y las personas de tercera edad esperamos es que el presidente Gustavo Petro Gobierne, mientras se acerca la cita en las urnas en el año 2026. «El país necesita la construcción de puentes y no se muros en lo económico, social y alrededor de la política exterior».
Es oportuno recordar, en la recta final del mes de agosto, la experiencia de Europea. «Después de dos Guerras Mundiales. Con 50 millones de muertos. Aprendieron la lección. Pasaron a un bloque político y económico. Fue un salto al futuro».
Con aciertos y errores fue el mejor camino. Más allá de las diferencias en Colombia, se debe apostar a un modelo de país donde se respire el aire se hacer las cosas bien. Dónde no haya campo a la improvisación.
Hay que pensar con la cabeza y no con los pies. Es un tema de eficiencia, moralidad. En una palabra: un Gobierno de eficiencia.
Llegó la hora de romper esquemas en las campañas políticas de cara a la carrera presidencial. No basta con la presencia de influencer, discursos con palabras bonitas. Se requiere un candidatos a Jefatura del Estado coherentes, con un equipo interdisciplinario capacitado en lo económico, en lo técnico y alejado de la militancia política.
Esa es la receta para hacer de Colombia viable con una proyección al 2060, donde se privilegie la creatividad de los niños y jóvenes sobre las noticias falsas y la inteligencia artificial.
«Los candidatos presidenciales no pueden ser cómplices pasivos de la crisis de la Colombia de hoy. Están llamados a liderar una nueva juventud en lo político, económico y social en el país del realismo mágico»