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Coronel Dario Ruiz Tinoco.
Evoco en esta oportunidad un evento que hace alguno, me refirió uno de sus protagonistas, el edecán presidencial del Presidente Lleras Restrepo, el capitán Numa Pompilio; ello ocurrió en 1970, con ocasión de la visita a Colombia del presidente electo de Costa Rica de José María Figueres Ferrer; el canciller era Alfonso López Michelsen y como es costumbre en al ámbito de la diplomacia, las atenciones brindadas a tan ilustre visitante serían correspondidas con el ofrecimiento de una cena protocolaria en honor a nuestro mandatario .
Dentro de las virtudes que tenía el presidente Lleras figuraba la más estricta puntualidad, y respondiendo a esa virtud llegó con su comitiva a la hora señalada para la cena; sin embargo se percató que el anfitrión, el Presidente Figueres no se encontraba por estar atendiendo una rueda de prensa, es decir no había comité de recepción como lo ordena el protocolo diplomático. El presidente Lleras miró su reloj y le indicó a su edecán, cuando pasen diez minutos usted me lo hace saber, y en efecto transcurridos esos diez minutos dispuso el retiro la delegación que él presidia y se desplazó hacia el Palacio de San Carlos, la antigua sede presidencial con el consabido y entendible disgusto.
A los pocos minutos de haberse retirado el Presidente Lleras, José María Figueres arribó al lugar de la cena y se enteró de lo acababa de suceder y angustiado corrió hacia el Palacio de San Carlos para a presentar excusas y obtuvo la respuesta del primer mandatario de los colombianos que le fue transmitida por boca de su Canciller López Michelsen “dígale al Presidente Figures que no lo voy a recibir”; luego de una larga espera lo recibió con la frase que lleva el título de este articulo :”En Colombia la dignidad Presidencial se respeta”.
Alberto Santofimio Botero, en 1969 fue arrestado por 72 horas por orden del presidente Lleras por haberse referido públicamenttérminos soeces en su contra “La dignidad Presidencial en Colombia se respeta”.
Las cosas han cambiado en Colombia y hoy la oposición, la izquierda recalcitrante e irracional irrespeta la figura presidencial
Siendo mayor del Ejército Nacional adscrito al Departamento D-2 de EMC asistí como oficial asesor a una reunión privada acompañando al Jefe de dicho departamento el Brigadier General Carlos Julio Gil Colorado y a todo el alto mando militar, incluyendo al Jefe de Estado Mayor Conjunto, General Farouk Yanini Días. Reunión que fue presidida por recién nombrado ministro de Defensa Rafael Pardo Rueda y la ministra de Relaciones Exteriores Noemi Sanín. A propósito, primer ministro de Defensa civil con cuyo nombramiento se rompió la tradición de tener ministros de defensa representados en el General de Mayor rango y jerarquía. .
El ambiente de la reunión se comenzó a deslucir debido a la actitud del ministro de defensa hostil hacia el mando militar. Mi General Yanini hizo un comentario sobre un tema de política exterior, opinión en desacuerdo con lo que pensaba el ministro, quien en voz alta le replicó al general Yanini ¡General por un comentario inferior al suyo dimos de baja a un embajador”! Mi General Yanini a quien conocimos por talante y firmeza, inmediatamente se levantó de la silla e respondió airadamente: “! Ministro al General Yanini no lo da de baja nadie, y usted lo sabe, él se va cuando quiera!” y acto seguido tomó su gorra y el bastón de mando abandonó la airadamente la reunión.
Los rostros de los ministros palidecieron ante la respuesta del General Yanini . Todos se miraron con sin pronunciar palabra alguna y así concluyó la reunión. Mi general Gil Colorado no podía ocultar su disimulada sonrisa de satisfacción. ¡El mensaje fue claro para el ministro, “la dignidad de los militares se respeta! Una pregunta me hizo al otro día del incidente mi general Yanini:” ¿” Ruiz, anoche la embarré”? y yo que podía responderle al jefe del Estado Mayor Conjunto,” Si mi general, usted anoche la embarró, pero la embarró bien”
