Por Ximena Martínez León
Experta en sicología sistémica, publicista y escritora
Autora del libro «Mil vidas antes de morir»
E mail xm3370@hotmail.com
Bogotá, octubre de 2024. News Press Service. Pérdida de vidas de más de 60 personas, más de un centenar de heridos, miles de millones de dólares en bienes materiales e imágenes «Apocalípticas», resumen el paso de «Dana» en la ciudad de Valencia en España en el cierre del mes de octubre de 2024.
Este fenómeno natural -24 horas de altas precipitaciones – no es una noticia que debe pasar al baúl del recuerdo, sino que coloca en la agenda pública mundial el impacto del cambio climático y la sicología ambiental.
Está es una conversación que debe nacer desde Europa, América Latina, Asia, Oceanía o Estados Unidos, desde un enfoque de la gestión ambiental del territorio. «Existe un escenario por trabajar y descubrir desde el sector público y privado la sicología ambiental».
De entrada, cuidar los humedales, la cuenca de los ríos y la reforestación debe ser un tema de Estado, más allá de una coyuntura o una acción política de cualquier ideología. «La sicología ambiental, aporta hoy elementos de gerencia pública desde el cuidado de la vida de la raza humana, el ecosistema ecológico y la disposición de basuras».
En lo particular, soy abandera de construir una salud ambiental viable y sostenible en el tiempo, desde una interacción de los seres humanos con la naturaleza.
No basta con voces de solidaridad y apoyo a España; en particular, a la ciudad de Valencia, donde las víctimas y los heridos por el paso de «Dana», levanta lágrimas y desesperación de diferentes actores.
El cuidado del medio ambiente debe partir desde casa, los colegios y las ciudades, desde una plataforma de la disposición final de la basura. «Lo que pasó en la ciudad de Valencia en España, no es solo del resorte del Gobierno del presidente Pedro Sánchez o el Congreso. De la Corona en cabeza del Rey Felipe VI».
Lo más preocupante, podría estar por venir para la humanidad; si, se confirma que el «pulmón del mundo»: el Amazonas se apaga a paso acelerado.
Son las acciones humanas que nos coloca en presencia en el cierre del mes de octubre de 2024, de la desolación y la destrucción rural y urbana de un porcentaje importante de la la ciudad de Valencia en España.
Cualquier urbe, es vulnerable al cambio climático. Desde la sicología, estamos en capacidad de prestar nuestros servicios profesionales, desde una acción local con visión global.
Los invito, amigos lectores, hacerse está pregunta: cómo podemos aportar a disminuir el cambio climático desde nuestros hogares o sitios de trabajo?
Está en juego el presente y futuro del planeta, desde la sostenibilidad. «El primer paso, es disponer de manera adecuada de los residuos en casa».