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Leonidas Torres Lugo, Director del Colegio de Abogados del Tolima Grande
Por Gerney Ríos González
Leónidas Torres Lugo, egresado de la Facultad de Derecho y Ciencias Políticas de la Universidad La Gran Colombia en 1984. Especializado en Derecho Administrativo y Constitucional, Derecho Probatorio, Derecho Penal, Derecho Comercial. Magíster en Derecho Público de la Universidad Externado de Colombia y profesor universitario en la cátedra de Derecho Administrativo y Constitucional Colombiano. Director del Colegio de Abogados del Tolima Grande e integrante de la Corporación Transparencia Jurídica Internacional.
Concejal y Personero del Municipio de El Espinal, abogado litigante durante 35 años, primordialmente en derecho público. Destacado jurista, portador de un gran don de gentes, hombre transparente, conciencia moral en el foro de la abogacía, ejemplo de rectitud y de respeto por el Estado de Derecho. Distinguido por su disciplina en el estudio de la ciencia del derecho, adelantando investigaciones que han generado jurisprudencia y la realización de la justicia en casos emblemáticos. Sus aportes de litigante a la administración de justicia son reconocidos a nivel nacional, considerado uno de los hijos ilustres del Tolima.
Sin ser servidor Judicial, Leónidas Torres Lugo, en el ejercicio de la profesión ha dejado huella en la solución de problemas jurídicos, en beneficio de la sociedad y de los mismos funcionarios judiciales, generando fallos que permiten la reivindicación y la protección de derechos de ciudadanos de todos los estrados, haciendo del ejercicio de la abogacía un verdadero servicio social.
Logró la indemnización a familiares de individuos fallecidos, a personas privadas injustamente de la libertad, a humildes niños y adultos que quedaron discapacitados por la omisión o culpa de las autoridades públicas, por inadecuado mantenimiento de vías, imprudencia de la fuerza pública, falla del servicio médico, negligencia de quienes deben prestar un servicio o el obrar ilegal de las autoridades.
Una investigación adelantada por el jurista Leónidas Torres Lugo, en el campo del derecho público, detectó que la reglamentación deliberadamente engañosa de decretos reglamentarios del gobierno Nacional desarrollando la ley marco sobre el régimen salarial y prestacional de servidores públicos, a todos los jueces, magistrados, y fiscales de la nación, no les reconocía una prestación de gran significancia, creada desde 1992, que en la nómina era anunciaba como si se les pagara. Luego de un largo debate jurídico de más de cuatro lustros, ante la Jurisdicción Contenciosa Administrativa, logró en el Consejo de Estado hacer notar esta antinomia jurídica, y obtuvo dos sentencias de Unificación Jurisprudencial del Consejo de Estado, de fecha 2 de septiembre de 2019 y 15 de diciembre de 2020, a través de las cuales la alta corporación de justicia, definió que toda prima significa un agregado o adición al salario y nunca una disminución o merma de éste, ordenando sufragar durante tanto tiempo, el negado derecho laboral.
El togado, Leónidas Torres Lugo, sin ser legislador, además de las sentencias de unificación del Consejo de Estado, que son normas jurídicas obligatorias, generó derecho, y en acatamiento de jurisprudencia cohesionadora, el gobierno emitió el decreto 272 de marzo de 2021, reglamentando debidamente la prima laboral creada por el artículo 14 de la ley 4 de 1992, equivalente al 30% del salario básico de los servidores judiciales, disponiendo su pago; emolumento que no solo debe abonar hacia el futuro, sino con amplios periodos de retroactividad.
Leónidas Torres Lugo, conferencista dinámico, por su conocimiento, es un consultor del derecho, atiende con sencillez y brillantez las múltiples inquietudes que a diario le son formuladas, un jurisconsulto en el ámbito jurídico, incluso para los mismos funcionarios judiciales.
El maestro Leónidas Torres Lugo, es un referente a seguir, creador de escuela, desarrolla su ejercicio profesional con la discreción que aconseja la prudencia, no le preocupa la vida mediática, no aspira a la proclamación pública, su labor trasciende e incide en el mundo del derecho, por la eficacia de sus actuaciones, el aporte a la justicia y ante todo a la reivindicación del decoro, buen nombre y magnanimidad de la abogacía. De todas las virtudes predicadas del jurista, las que irradian son lealtad procesal, honorabilidad, transparencia, humildad, responsabilidad en el cumplimiento del deber profesional y su gran aporte a una sociedad necesitada de valores éticos.
En los foros y seminarios jurídicos e internacionales que hemos organizado en los 47 municipios de la divisa “vino tinto y oro”, con Transparencia Jurídica Internacional, la Cámara de Integración Geoeconómica de Colombia, Caribe e Indoamérica (CIGECCIN), la Cámara de Comercio del Sur y Oriente del Tolima, la Cámara de Comercio de Honda, Guaduas y Norte del Tolima con el Colegio de Abogados del Tolima Grande, liderado por los juristas Oscar Miguel Valero Rodríguez, José Gentil Palacios Urquiza, Luis Ángel Carmona Fiztgerald, María del Pilar Serrano Buendía, Viviana Marcela Pedraza y, los exmagistrados oriundos de Armero, Manuel Isidro Ardila Velásquez y Leonardo Augusto Torres Calderón, recuerda en sus ponencias Leónidas Torres Lugo al pensador y escritor argentino, Ernesto Sábato acerca del valor de la modestia, “Se necesita mucha grandeza para ser humilde” y agrega, “solamente los ignorantes son engreídos, como el pavo real ufanado de su hermosa cola de colores, uno de los animales más torpes y qué decir del imbécil al sustentar su poderío por los bienes materiales obtenidos con dinero y no por su capacidad mental e intelectual”.
En la condecoración “Mérito Académico” entregada en el salón Virreyes de la Universidad La Gran Colombia a Jaime Melo Palma, William Calderón Perdomo, Alfredo Molina Triana, Jorge Eduardo Casabianca Prada, Oscar Valero, destacados líderes del Tolima, integrantes de la Corporación Transparencia Jurídica Internacional y la Academia Hispanoamericana de Letras, Ciencias e Historia Miguel de Cervantes Saavedra, el abogado grancolombiano Leónidas Torres Lugo destacó en los medios de comunicación la importancia de la distinción: “El propósito de la justicia es dar a cada cual lo debido. Quien es justo es sabio. El justo es sin proponérselo, un ser extraordinario por cuanto la equidad es un valor difícil de cultivar. La justicia y los honores hay que merecerlos”. Felicitaciones, colombianos de excelencia.
