News Press Service
Por Alberto Restan
Fue miembro del Partido Liberal durante gran parte de su trayectoria política y líder del movimiento Poder Ciudadano, en la izquierda de dicho partido. Como congresista trabajó por los derechos de la mujer, las minorías raciales, étnicas y sexuales (personas LGBT) y los derechos humanos.456
Fue Senadora de la República desde 1994 hasta su destitución en el 2010, luego de que la Procuraduría General de la Nación, en cabeza de Alejandro Ordóñez, la acusara de colaboración con las FARC-EP, en el denominado «Caso Piedad Córdoba».
El 27 de septiembre de 2010 fue inhabilitada en primera instancia por un periodo de 18 años para ejercer cualquier cargo público en la República de Colombia.
Sin embargo, luego de una larga investigación, el 11 de octubre de 2016 el Consejo del Estado retiró ambas inhabilidades por falta de pruebas sobre los supuestos vínculos de la exsenadora con la guerrilla de las FARC-EP, decisión que le devuelve a Piedad Córdoba la posibilidad de ocupar cargos públicos y de elección popular.
En agosto de 2007 Córdoba se involucró en el tema del acuerdo humanitario entre las FARC-EP y el gobierno del presidente Álvaro Uribe autorizada por el gobierno del cual era opositora, durante su mediación acordó, junto con las FARC-EP y el presidente venezolano Hugo Chávez, la liberación unilateral de 6 secuestrados que permanecieron en poder de las FARC-EP durante varios años.
Debido a sus posiciones políticas recibió múltiples críticas y una percepción negativa en muchos sectores de la opinión pública,9 mientras otros sectores respaldaron su gestión por la cual en 2008 fue nominada al Premio Príncipe de Asturias de la Concordia.10
Córdoba continuó trabajando por la liberación de los secuestrados y logró convocar a un grupo de intelectuales de varios países para iniciar un diálogo epistolar con la cúpula de las FARC-EP.
Gracias al intercambio epistolar, las FARC-EP respondieron los pronunciamientos de Córdoba y su grupo Colombianos y Colombianas por la Paz y decidieron liberar unilateralmente a tres policías y un soldado y a los últimos dos rehenes políticos que permanecían en su poder. Para la operación de la liberación, llevada a cabo en febrero de 2009, la senadora contó con el apoyo del CICR y el gobierno de Brasil, así como con la autorización del gobierno colombiano.
Por estos actos, el Premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel propuso públicamente, y de manera formal ante el Comité del premio Nobel en Oslo, el nombre de Córdoba como candidata al Premio Nobel de la Paz 2009.13 La senadora se declaró no merecedora del premio. Finalmente el premio recayó en el Presidente de los Estados Unidos Barack Obama.
Durante su carrera, Córdoba enfrentó controversias, incluyendo acusaciones de simpatizar con la guerrilla de las FARC y su secuestro en 1999 por las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC).
Tras el secuestro, se exilió brevemente en Canadá, regresando a Colombia para continuar su activismo político. Durante el gobierno de Álvaro Uribe (2002-2010), su amistad con el presidente venezolano Hugo Chávez y su mediación en la liberación de secuestrados por las FARC, aumentaron su notoriedad y controversia.16
En 2010, Alejandro Ordóñez, entonces procurador general, la destituyó e inhabilitó para ejercer cargos públicos durante 18 años, acusándola de colaborar con las FARC. Sin embargo, continuó su activismo por la paz y mantuvo relaciones con líderes políticos como Chávez y Nicolás Maduro.
Se le vinculó con Álex Saab, empresario colombiano y presunto testaferro del chavismo, y se sugirió que Córdoba pudo haberlo presentado a Maduro.16
A pesar de estar apartada del Senado, el presidente Gustavo Petro la integró en la lista del Pacto Histórico para las elecciones de 2022, aunque problemas de salud limitaron su participación política.
En su último periodo como senadora, enfrentó la extradición a Estados Unidos de su hermano Álvaro por cargos de narcotráfico, manteniendo la fe en su inocencia.
En 2017, Córdoba anunció oficialmente su intención de postularse para la presidencia en 2018 sin embargo se retiraría de la misma ante las fuertes críticas de sus opositores por los señalamientos y acusaciones que ha recibido en el pasado.
En febrero de 2022, la excandidata presidencial y secuestrada de las FARC-EP Ingrid Betancourt acusó a Piedad Córdoba diciendo que «retrasó deliberadamente mi liberación con fines políticos».
Este fue uno de los motivos por los que Piedad Córdoba fue destituida del Congreso de Colombia al «extralimitarse en sus funciones» por su involucramiento directo en las negociaciones entre las FARC-EP y el gobierno colombiano para liberar secuestrados.19
En febrero de 2022 Córdoba fue acusada por el candidato al Senado Luis Mendieta Ovalle de «haber traficado con el dolor, del sufrimiento de los secuestrados y sus familias».
Se unió en el mismo año a la coalición del Pacto Histórico para las elecciones de 2022.
Falleció en su residencia en la ciudad de Medellín el 20 de enero de 2024 a causa de un infarto fulminante a sus 68 años de edad.