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El Parlamento Europeo, reunido en Estrasburgo, aprobó por abrumadora mayoría su primera resolución, en la que reafirmaba su apoyo a Ucrania.
La resolución no legislativa fue aprobada por amplia mayoría: 495 votos a favor, 137 en contra y 47 abstenciones. Reafirma el compromiso de apoyar a Ucrania: política, económica y militarmente, «durante el tiempo que sea necesario para garantizar la victoria contra la invasión rusa».
Hasta ahora, dice el texto, la UE y sus Estados miembros han proporcionado a Ucrania una suma total de unos 95.000 millones de euros, un tercio de los cuales en ayuda militar. También apoya el levantamiento de las restricciones al uso de armas occidentales suministradas a Ucrania para atacar objetivos militares en territorio ruso.
Orbán demuestra no sólo que no sigue los objetivos y las normas de la UE, sino también que se comporta como un agente de Putin
«Orbán es un agente de Putin»
La resolución también condena la reciente visita a Moscú del primer ministro húngaro, Viktor Orbán -que ocupa la Presidencia de turno del Consejo de la Unión Europea-, donde se reunió con el presidente ruso, Vladímir Putin, en el marco de lo que denominó una «misión de paz».
Pero el Parlamento Europeo lo considera más bien una «flagrante violación de los tratados de la UE y de la política exterior común», que entre otras cosas no dio ningún resultado apreciable.
«Tal comportamiento es una clara violación de los tratados», dice a ‘Euronews’, Andrius Kubilius, eurodiputado del Partido Popular Europeo. «Pero, por supuesto, también desde un punto de vista político, creo que es un gran error por parte de Orbán. Demuestra no sólo que no sigue los objetivos y las normas de la UE, sino también que se comporta como un agente de Putin».
Según la resolución, la violación de las normas debería acarrear repercusiones para Hungría, acusada por la Eurocámara, entre otros, de «abusar de su poder de veto para impedir la concesión de ayuda esencial a Ucrania».
El enfrentamiento con la derecha radical y la izquierda
El apoyo a Ucrania divide a los grupos de la derecha radical. Los Conservadores y Reformistas Europeos promovieron la resolución, votando en conjunto a favor, salvo algunas deserciones. El grupo de Patriotas por Europa (incluida la Liga) y la Europa de las Naciones Soberanas, en cambio, votaron en contra.
El eurodiputado belga Tom Vandendriessche, del partido soberanista flamenco Vlaams Belang, explicó así la postura de su delegación: «Queremos que cesen las matanzas y, para ello, creo que uno de los elementos es el diálogo y la diplomacia. Tenemos que entablar un diálogo con todos los actores relevantes: Orbán no sólo habla con Zelenski, sino también con Putin, Xi Jinping y, en Estados Unidos, con Biden y Trump… Creo que es necesario dialogar para intentar llegar al resultado deseado de detener las matanzas y devolver la paz a este país».
Entre otros que se opusieron, muchos de los eurodiputados que se sientan entre los no inscritos, parte del grupo de la Izquierda (incluidos los eurodiputados del Movimiento Cinco Estrellas), y tres eurodiputados de la Alianza Verdes/Izquierda, disidentes del grupo de Los Verdes/Ale.
