News Press Service. Algunas vez en una escuela danesa hicieron un estudio. Sólo una hora de celulares. A los seis meses les preguntaron a los estudiantes si la norma se debía cambiar. Los estudiantes contestaron que seguían con su hora, porque eso les permitía tener más tiempo para relacionarse con sus pares. Ese es el primer secreto: RELACIONARSE más seguido con familiares, amigos y colegas… Si cada día cumple horarios, o tiene un jefe que pide informes, o espera que llegue el mes para cobrar… pero si se lanza a la aventura y tiene su propio negocio y cuenta con flexibilidad laboral y una mayor autonomía; he ahí el segundo secreto: su LIBERTAD no tiene precio. Es combatir lo que genera estrés. Usted puede comprar cama, pero no el sueño; mejor dicho: si quiere comprar tiempo para liberarse de aquello que no le gusta hacer y así poder dedicarse a lo que le agrada; qué espera; nadie lo hará por usted. El tercer secreto se llama disfrute la vida, o en otras palabras, que el DINERO sea medio y no un fin; no paga ser avaro; invierta en su felicidad; compre su tiempo. Y otro: la confianza. Hicieron un nuevo experimento. Dejaron una billetera abandonada en la calle, con dinero adentro y con papeles de identidad del propietario. Las billeteras intactas en un 92% fueron devueltas. Eso sucedió en Finlandia. El secreto es ser digno de CONFIANZA. Ese es el capital mayor. Que los demás confíen en usted y entonces tendrá medio mundo en sus manos. Y si sale a la calle y encuentra que alguien necesita de su ayuda, nunca se la niegue, porque si tiene veinte mil para el taxi, pero alguien le pide para el transporte, regale la mitad, agarre su bus y con ese gesto sentirá que estará sembrando, porque cuando haya cosecha alguien se acordará de ti; póngale fe que a todos nos va bien. Trabajar honoris causa es filantropía, es BONDAD, escasa pero bendita. Y por último: cuide su SALUD, porque si lo hace el planeta entero se lo agradecerá. Los enfermos se mueren y siempre cuestan plata. Hasta luego.
18.VIII.20. Elías Prieto Rojas.