Bogotá. News Press Service. El aprovechamiento de la piangua como recurso pesquero, se ha desarrollado con fuerza durante los últimos años logrando establecerse como la base económica de algunas familias del Pacifico y a su vez parte importante de la dieta de las personas dedicadas a la extracción.
Esta especie ha sufrido una fuerte presión y reducción poblacional debido a dos aspectos fundamentales: la tala indiscriminada del mangle con fines de aprovechamiento forestal y la pesca indiscriminada del recurso. Los bosques de manglar actualmente brindan la seguridad alimentaria a las comunidades locales ya que, se han constituido en su principal fuente de sustento a través de actividades relacionadas con la pesca y el ecoturismo.
“El aprovechamiento de la Piangua está asociado a las tradiciones culinarias del pacifico, una labor que realizan mujeres de manera artesanal que es poco valorada y remunerada. Sin embargo, las piangueras del Chocó le siguen apostando al aprovechamiento sostenible de este recurso y a la conservación de los ecosistemas de manglar en la región preservando los ecosistemas al mismo tiempo que sostienen a sus familias”, comenta Arnold Rincón López -Director de CODECHOCO
Es importante recordar que, los manglares son considerados uno de los depósitos más importantes de carbono azul, que ofrecen un aporte vital para la salud del planeta, dado que retienen las emisiones de dióxido de carbono (CO2). En el Pacífico colombiano el área de bosque de manglar pasó de 55.394,27 hectáreas en 2009 a 144.704,34 hectáreas en 2019, lo que significa una reducción del 6,88%. Dicha estimación evidencia la urgente necesidad de emprender acciones que permitan conservar estos valiosos ecosistemas.
Al respecto, desde la Corporación Autónoma Regional para el Desarrollo Sostenible del Chocó – CODECHOCÓ se organiza el primer encuentro de mujeres recolectaras de Piangua en el municipio del Bajo Baudó – Pizarro entre el 30 de noviembre al 01 de diciembre, con el objetivo de seguirle apostando a la sostenibilidad de los recursos naturales generando espacios donde se reconozca la labor de las mujeres que se dedican a la extracción de la piangua y su papel determinante en el desarrollo, la seguridad alimentaria y la erradicación de la pobreza en sus comunidades.
El encuentro también busca fomentar el desarrollo de esta actividad con miras a salvaguardar el recurso y la protección de sus ecosistemas, la conformación de emprendimientos que permitan la comercialización del producto. Además de, adelantar acciones que permitan a esta comunidad obtener el incentivo “bonos de carbón azul” donde se ejerce la actividad y siembran mangle en los territorios de los consejos comunitarios como Los Riscales, ACADESAN, Sivirú, Cuevitas, Río Pilizá, CONCOSTA, San Andrés de Usaragá y Villa Maria.